Las asociaciones vecinales nacieron promovidas, muchas de ellas, por gentes allegadas a Madrid procedentes de otras regiones españolas para buscar aquí un trabajo digno. Desde entonces, Madrid ha seguido acogiendo a miles de personas procedentes de otros países y el movimiento vecinal ha seguido trabajando para garantizar en los barrios una convivencia basada en el respeto y la mezcla de diferencias culturales. La FRAVM ha elaborado una guía que recoge algunas de estas iniciativas que se presento al público el pasado martes 5 de junio en Matadero Madrid.