El colectivo Espacio Vecinal Arganzuela (EVA) presentará este sábado su proyecto sobre lo que podría ser el antiguo Mercado de Frutas y Verduras de Legazpi si lograra convertirse en un espacio de uso público con fines culturales y sociales sin afán de lucro, una demanda histórica del barrio.
A pesar de que las intenciones actuales del Ayuntamiento con respecto a este enclave histórico de la capital son muy diferentes, los colectivos que forman EVA quieren exponer algunas de las iniciativas que llevarían a cabo si las autoridades finalmente accedieran a la cesión del espacio para un uso colectivizado, atendiendo a las necesidades reales del barrio: programas intergeneracionales, empoderamiento vecinal, redes de solidaridad, apoyo escolar, alfabetización y memoria, redes de crianza o grupos de consumo, entre otras. Las actividades comenzarán a las 12:00 de este sábado, 14 de marzo, en la sala Intermediae del Matadero y se prolongarán durante toda la tarde, hasta las 21:00 aproximadamente.
Esta jornada de presentación de proyectos de EVA contará con una mesa redonda en la que estarán representados otros centros sociales, como Seco, Montamarta o Campo de la Cebada; habrá una mesa de urbanismo, en la que participarán Sergio Martín, Eduardo Mangada, n´UNDO y Mapa de los horrores; algunos arquitectos expondrán sus opiniones sobre la iniciativa; se proyectarán vídeos informativos; y tendrán lugar múltiples actividades lúdicas: juegos para niños, un programa de radio, un photocall, asamblea del Paseo de Jane, talleres Hackity, cuentacuentos, comida popular y muchas otras.
Como colofón de acto, se leerá un manifiesto en contra de la propuesta del Ayuntamiento de privatizar este espacio (que es de uso dotacional) justo antes de las elecciones municipales.
Más de 20 colectivos
En el proyecto EVA – Espacio Vecinal Arganzuela están implicados más de veinte colectivos, desde asociaciones vecinales a arquitectos, movimientos sociales y ampas, entre otros, movilizados por la necesidad real de esta zona, con un importante déficit de equipamientos, tal y como reconoce el propio Ayuntamiento en su proyecto de Plan General de Ordenación Urbana.
Por ello demandan, con carácter temporal, usar libremente las instalaciones del Mercado de Frutas y Verduras de Legazpi y poder disponer del suministro básico para su funcionamiento – agua y luz –, sin necesidad de subvenciones económicas ni de adecuación del espacio puesto que el proyecto tiene prevista la autogestión. A cambio de la cesión, los promotores se comprometen a generar y gestionar actividades abiertas al público y sin afán de lucro.
