La Asamblea Popular de Carabanchel ha consensuado asistir
a la manifestación contra los recortes que se ha convocado para el 15 de Septiembre como bloque crítico. Son muchas las causas que unen a esta asamblea a la movilización: aunar fuerzas con los distintos movimientos sociales, el rechazo a los recortes injustificados que castigan a los sectores más desfavorecidos de nuestra sociedad, y la lucha por los derechos perdidos, entre otras.
Desde la Asamblea exponen que "el reproche más duro se dirige hacia los mencionados recortes realizados por el gobierno y la perdida de derechos que éstos suponen para la ciudadanía. No obstante consideramos que la convocatoria con la que se pretende hacer presión social para aprobar un referéndum, es una demanda insuficiente para provocar un verdadero cambio social. El referéndum propuesto en sus dos modalidades, realizado por el Gobierno o por la Cumbre Social, no es vinculante, y no señala que hay que hacer más allá de una probable huelga general".
Además, añaden que "si tenemos en cuenta el documento aprobado por la Cumbre Social echamos en falta algunas reclamaciones tales como una auditoría y no pago de la deuda y una verdadera ruptura con el sistema imperante, sus estructuras y formas de explotación, por ejemplo"
Por otro lado, desde la Asamblea opinan que "creemos que los sindicatos convocantes mantienen unas relaciones clientelistas con el Gobierno, a través de las cuales han firmado pactos que han resultado perjudiciales para la clase trabajadora, y que en todos los procesos de negociación previos, no han contado en ningún momento con la opinión y participación de las personas a las que iban a afectar estas medidas, y a las que representan. Esta forma de proceder y el contenido de los acuerdos alcanzados reflejan una preocupante deficiencia democrática y una actitud acrítica con el sistema capitalista imperante".
Las propuestas de la Asamblea Popular de Carabanchel son:
– Utilizar la inteligencia colectiva, la experiencia y conocimiento de cada una de ellas para conseguir parar los recortes, en este caso.
– La inclusión en el manifiesto de la negativa al pago de la deuda de bancos y empresas. La deuda no la pagamos, no la reconocemos, no es nuestra y exigimos una auditoría de la deuda.
– Derogación de la reforma del artículo 135 de la Constitución del Martes 27 de septiembre de 2011. Donde se dice: “Los créditos para satisfacer los intereses y el capital de la deuda pública de las Administraciones se entenderán siempre incluidos en el estado de gastos de sus presupuestos y su pago gozará de prioridad absoluta”.
– Nuestra Constitución contemplaba hasta entonces la defensa del estado social, defensa que está siendo debilitada por estas regulaciones nacionales e internacionales, en contra de sus intereses.
– La inclusión en el manifiesto de la reforma de la ley de Iniciativa Legislativa Popular, dado que el referéndum no tiene carácter vinculante para el Gobierno. Exigimos que la participación política de la sociedad pueda ser una realidad y no una quimera. La mayoría de las Iniciativas Legislativas Populares registradas en España han sido desestimadas en la práctica, y denunciamos que el sistema político y el ordenamiento jurídico nacido de la transición fueron construidos con el objetivo de reforzar los mecanismos de representación y poder de los partidos políticos, no de la ciudadanía.
