La Policía Nacional ha detenido a dos hombres que intentaron arrollar a dos agentes con un vehículo robado cuando fueron sorprendidos en el interior de un garaje en la calle Avenida de los Poblados en el interior de varios turismos. Los detenidos tienen 44 y 38 años, ambos de nacionalidad española, y en el momento de ser arrestados propinaron patadas y puñetazos a los policías llegando a amenazarles con un destornillador, causándoles lesiones por la que los agentes permanecen de baja.
Según informa Jefatura Superior de Policía de Madrid, los dos hombres arrestados están acusados como presuntos autores de un delito de atentado a agentes de la autoridad con lesiones, robo de vehículo y otro contra la seguridad vial. Los presuntos ladrones habían sustraído un vehículo del interior de un garaje de una empresa y fueron sorprendidos por los agentes cuando trataban de robar en el interior de varios turismos de otro garaje en una finca privada. En su huida trataron de arrollar a los policías.
Los hechos sucedieron en la madrugada de ayer en un garaje ubicado en la Avenida de los Poblados. La llamada de un vigilante de seguridad al 091 alertaba de la presencia sospechosa de dos individuos que habían accedido a su interior. A la llegada de los agentes comprobaron como dos personas se encontraban manipulando un turismo con un destornillador y al ser sorprendidos se subieron a bordo de un vehículo y emprendieron la huida tratando de arrollar a los policías, que tuvieron que echarse a un lado para evitar ser atropellados.
Dado que las puertas del garaje se encontraban cerradas, tuvieron que dar marcha atrás intentando nuevamente acometer contra los agentes, golpeándoles con el coche. Al ver que no tenían escapatoria decidieron descender del vehículo y continuar su huida a la carrera, no consiguiéndolo ya que fueron interceptados por los refuerzos policiales que habían llegado al lugar, detalla Jefatura.
En el momento de ser detenidos mostraron en todo momento una actitud «desafiante y agresiva» propinando diversas «patadas y puñetazos», llegando incluso a «amenazarles con un destornillador». Finalmente fueron reducidos, arrestados y ya han sido puestos a disposición judicial.
Los dos agentes tuvieron que ser trasladados al hospital como consecuencia de las lesiones que les ocasiono el golpe con el vehículo, causando baja para el servicio. Las detenciones han sido llevadas a cabo por agentes de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana y de la Comisaría del distrito de Carabanchel, todos ellos pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
