La Federación de Trabajadores de Seguridad Privada (FTSP) de Madrid ha denunciado la reducción de la vigilancia en los cementerios de La Almudena y de Carabanchel.
Desde este mes, sólo habrá un vigilante durante las 24 horas para cada uno de estos camposantos. Una decisión que ha criticado la FTSP, ya que defienden que un vigilante es muy poco para la gran extensión de estos cementerios, en los que, además, al ser recintos públicos, el acceso es libre, por lo que están expuestos a todo tipo de personas. Pueden producirse numerosos incidentes, como robos o actos vandálicos, que con un sólo vigilante son difíciles de controlar.
Los vigilantes serán sustituidos por un sistema de seguridad por cámaras. Desde la Federación no entienden esta decisión y defienden que puede hacer que se aumente la inseguridad del público visitante.