El centro de Educación Infantil Valle del Oro pemanece cerrado de manera indefinida desde el pasado 21 de diciembre. La razón, según la Consejería de Educación, son “unos fallos estructurales que se han detectado en el edificio”. Los padres de los niños, con edades comprendidas entre los 0 y los 3 años, aseguran que les enviaron una carta de un día para otro y que, aunque han intentado en varias ocasiones ponerse en contacto con la Comunidad, ésta “está de vacaciones”. En dicha carta también se les anuncia que sus niños serán reubicados en la guardería privada “Cinco lobitos”, situada en el PAU de Carabanchel lo que ha provocado la queja de muchos padres ya que ahora “tendrán que coger el metro con los niños” y emplear más tiempo. Por otra parte, algunos progenitores, aseguran que el director del centro les informó de que el edificio tenía abierto un expediente por diferentes deficiencias en la es-tructura del edificio desde 2001. Al parecer las paredes del centro presentan “grietas por las que puede pasar un folio” aunque al estar en lugares escondidos éstas han pasa-do desapercibidas por los padres.
Soluciones prácticas ya
Ante esta situación totalmente inesperada, los padres han decidido escribir una carta a la Consejería de Educación para reclamar información detallada sobre lo ocurrido, con el fin de saber si en algún momento existió peligro para los niños. Asimismo, reclaman que se reubique inmediatamente a los menores, puesto que la carta que recibieron indicaba que se haría “en enero”, pero no se fijó la fecha exacta. Además, también reclaman la financiación, por parte de la Comunidad, de un autocar escolar si finalmente los niños son trasladados a la escuela “Cinco lobitos” que, aunque también está en el distrito, se encuentra a 10 kilómetros de la guardería clausurada. Por último, los padres sugieren a la Comunidad que si la parcela en la que se encuentra la escuela consta de 2.000 metros y tan solo 400 de ellos están afectados, quedan disponibles 1.600 metros cuadrados “para instalar aulas prefabricadas que permitan mantener unidos a los niños con el mismo equipo educativo y en la misma ubicación”.
La guardería será demolida
Finalmente, el pasado 8 de enero los padres fueron informados de que la guardería sería demolida a partir del viernes 11 de enero. Esta noticia ha cogido por sorpresa a familiares y empleados del centro que temen que se haya tomado esta decisión tan rápidamente para eliminar posibles pruebas y depurar responsabilidades. Una portavoz de UGT ha apuntado también los mismos temores afirmando que puede ser que haya algo que no se les quiere decir y sospecha que la escuela puede estar peor de lo que se pensaba.
