“Este mes de diciembre va a hacer un año desde que el Ayuntamiento acordó que se le diera el nombre de Manolito Gafotas al Parque Lineal del Manzanares y durante este año el parque ha estado totalmente abandonado”, esto es lo que aseguran los vecinos de Carabanchel Alto. “Nadie se pasa para recoger los vertidos que cada vez inundan más el parque. No se cortan las malas hierbas, no viene ningún técnico a plantar árboles y tampoco a poner riego automático. Excepto en conseguir que el parque se llamara como pedían los vecinos no hemos avanzado en nada más”, afirma Roberto Rodríguez, miembro de la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto. “Este verano unos cuantos vecinos nos dirigimos a la Junta del distrito para alertar de que, debido a las malas hierbas que pueblan el parque y a los vertidos, se podía producir un incendio, y ellos nos contestaron que ese parque no es competencia suya. Lo cierto es que el tiempo pasa y el parque cada día se encuentra en un estado más lamentable”.
Los vecinos quieren recalcar que este parque ocupa gran parte del 40% de zona verde creada en el distrito por el Ayuntamiento y que, además, se construyó paralelo a la M-40 como barrera para proteger a las viviendas cercanas del ruido de los coches, “por lo que debería haber más interés por parte del Ayuntamiento en su cuidado”.
Deficenciencias en el PAU
Sin porterías, ni aros, ni marcas que delimiten las líneas del campo y con vallas rotas. Así se encuentran las cuatro canchas deportivas que hay en el PAU de Carabanchel, hecho del que también quieren alertar los vecinos. “Esto está denunciado desde septiembre del año pasado pero todavía no han hecho nada”, cuenta Roberto. “Las condiciones lamentables en que se encuentran estas canchas, dan para un más que posible accidente. ¿Por qué no hay un mantenimiento?”. Además, Roberto explica que “lo peor de todo es que no hay dónde poder practicar deporte en el barrio. Es increible que el Polideportivo Paquito Fernández Ochoa, ya terminado, todavía no se haya abierto al público cuando nos mandaron una carta anunciando su inauguración en marzo de este año”. Socavones, calles sin aceras, basura y escombros, invasión del carril-bici o alcantarillas rotas, son otros de los problemas de los que se quejan los vecinos del PAU. Situación que esperan que sea resuelta lo antes posible por el bien de todos.
