La banca es uno de los pilares económicos de Madrid: genera el 11,1% de su PIB y proporciona empleo a 88.000 personas. Por eso, al acoger desde hoy el Centro de Innovación del BBVA, "la ciudad da un nuevo e importante paso en el camino que es preciso recorrer para superar la crisis", ha señalado el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, en la inauguración de este centro, ubicado en el palacio de los Condes de Guevara, en la plaza de Santa Bárbara.
Gallardón ha calificado de "consciente y responsable" la política de su Gobierno, que es capaz de identificar el sector bancario como uno de los más relevantes y necesarios de la actividad económica, y también de apostar por la investigación y la búsqueda de modelos originales que ayuden a crear nuevos espacios de oportunidad desde la colaboración público-privada.
El Centro de Innovación del BBVA va a ser una referencia no solo para la propia institución que la ha impulsado, sino para todos los madrileños, "como consecuencia de un empeño compartido por atraer el talento innovador a nuestra ciudad". Un objetivo que el Ayuntamiento y la entidad bancaria persiguen desde los últimos años, colaborando en actividades como el Encuentro Europeo de Innovadores realizado el año pasado en la Caja Mágica, la Feria Internacional de Contenidos Digitales FICOD, la tercera edición de La Red Innova o el Día de Internet cada 17 de mayo.
El alcalde ha destacado el acierto del BBVA al apostar por Madrid como escenario de este nuevo espacio. Para la capital. La innovación es un aspecto clave no ya de su futuro, sino del más inmediato presente. "Ninguna otra metrópoli europea se ha transformado tanto y tan deprisa, dentro de un proceso en el que la sociedad y las administraciones han evolucionado a la par, y donde también el sector bancario ha mostrado que, sabe cambiar".
Si en el pasado Madrid fue una ciudad marcada por la presencia de la Administración, hoy se caracteriza, incluso en tiempos de crisis, por su autonomía económica, y más en concreto por su especialización en los servicios avanzados a empresas. Como revela en un informe reciente la consultora PWC, Madrid es, entre 26 ciudades globales, y solo después de Londres, la segunda en población activa dedicada a los servicios financieros y a los servicios avanzados a empresas, por delante de centros financieros como Nueva York, París o Hong Kong. Esta categoría de empleo, que incluye actividades relacionadas con la banca, los seguros, los servicios inmobiliarios, los servicios de profesionales independientes, asesoramiento, servicios técnicos y de gestión, "exige seguir haciendo un esfuerzo en el ámbito de la innovación, como garantía irrenunciable para asegurar los niveles futuros de crecimiento y empleo", dijo el alcalde.
Colaboración público-privada
Con el nuevo centro inaugurado hoy, Madrid avanza en ese objetivo, al tiempo que recupera parte de su patrimonio arquitectónico. La conversión del palacio de los Condes de Guevara en un lugar dedicado a la innovación satisface ambas necesidades, y expresa la vocación de una ciudad consagrada al conocimiento y las nuevas actividades productivas, de modo singular en el centro.
"Esta tarea solo es concebible desde la colaboración público-privada, capaz de convocar a todos, Administración, empresas y ciudadanos, en torno a la gran empresa nacional de la recuperación económica y laboral".
En Madrid existen otros espacios similares al que hoy se ha inaugurado y pensados para que una red multidisciplinar de personas con talento hagan uso de la tecnología y trasladen su resultado a la economía diaria, la de las PYMEs, la de las nuevas empresas, la de los autónomos y emprendedores. El alcalde ha citado el CIBALL del Ayuntamiento de Madrid y la Catedral de las Tecnologías, y también otros programas como la futura Escuela de Innovación.
