El 2011 ha sido un año de mucho ajetreo para los comerciantes de Sol. El Movimiento 15-M, surgido de una pequeña revolución social en contra del poder político a escasos días de las elecciones municipales y autonómicas del pasado 22 de mayo, convirtió la castiza plaza en un escenario de batalla. Decenas de tiendas de campaña dieron paso a un campamento improvisado que dificultó, durante aquellas semanas de ‘ocupación indignada’, la vida diaria de los residentes y comerciantes de la zona. Aquellos que tienen sus negocios en la Puerta del Sol y aledaños, sufrieron las consecuencias directas de aquel movimiento que impedía o dificultaba la entrada de clientes a sus establecimientos.
Por su paciencia, su comprensión e incluso, en algunos casos, por su apoyo, los comerciantes de Sol se han convertido en merecidos ganadores del Premio a la Tolerancia 2011, otorgado por la Comunidad de Madrid.
Este año, el galardón ha recaído sobre los comerciantes de Sol, en la categoría de colectivo; y sobre la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, María Ángeles Pedraza, en la categoría de individual. “En los dos casos estamos hablando de personas que son un ejemplo para todos los madrileños”, manifestó Ignacio González, vicepresidente, consejero de Cultura y Deportes y portavoz del Ejecutivo autonómico.
Tolerantes en la dificultad
La zona de Sol es uno de los principales motores económicos y comerciales de la capital. Cuenta con más de 2.000 m2 que dan cobijo a una amplia oferta de grandes almacenes, moda, ocio y hostelería, configurándose como un emblemático entorno turístico. Por eso, y por la tolerancia demostrada en los momentos más adversos, con manifestaciones y actos de cualquier índole en su terreno, la región ha querido homenajearles. Su forma de movilizarse cuando se han visto obligados a hacerlo ellos mismos, también denota el respeto por el que han sido premiados.
