Los centros de salud del Ayuntamiento deben seguir funcionando; ni la falta de presupuesto, debido a la enorme deuda municipal, ni la nueva Ley que regula el funcionamiento de las administraciones locales han de poner en peligro estos centros que trabajan por la salud y el bienestar de los madrileños. Así lo ha manifestado esta mañana el portavoz del grupo Municipal socialista, Jaime Lissavetzky, durante su visita al centro Joven Madrid Salud situado en la calle Navas de Tolosa, número 10, en el distrito de Centro.
Lissavetzky ha estado acompañado por los concejales de su grupo Pedro Zerolo, Marisa Ybarra y Carmen Sánchez Carazo, así como la diputada socialista por Madrid, Elena Valenciano, y la secretaria de Igualdad del PSOE, Purificación Causapié.
Durante décadas, los centros de salud municipales han llevado a cabo programas relacionados con la salud y su prevención, que han tenido un alto grado de aceptación por parte de los madrileños. Hasta el punto que se considera que muchos de sus usuarios han evitado acudir a la asistencia sanitaria primaria por haber aprendido en este tipo de centros medidas de prevención.
Ahora los centros de Madrid Salud, (el de Navas de Tolosa es uno de los más reconocidos) corren peligro de caer en un “agujero negro”, en palabras de Jaime Lissavetzky, en primer lugar por las condiciones de la reforma local, que otorgaría las competencias en salud a la Comunidad. “No queremos que haya grandes duplicidades pero tampoco queremos que disminuya nada la atención a los madrileños. Queremos que estos centros de salud sigan existiendo en Madrid”, ha apuntado.
“Además, defendemos que este centro siga existiendo como hasta ahora porque es el único en Madrid que se dedica a los jóvenes, que es una de las políticas olvidadas de Ana Botella. Tendría que haber un centro de este tipo por cada 10.000 habitantes, según recomendaciones internacionales, y no tenemos más que éste que funciona gracias al esfuerzo, la dedicación y la entrega de los profesionales que trabajan en él. Hay que agradecerles que mantengan estos centros en marcha mientras el equipo de gobierno mira para otro lado”.
El portavoz socialista ha vuelto a denunciar que un 25% del presupuesto municipal se lo llevan los bancos, debido a la enorme deuda que tiene el ayuntamiento de Madrid a raíz de los gastos desmesurados en la alcaldía de Alberto Ruiz-Gallardón y de Ana Botella. “Los madrileños pagamos 1.000 millones de euros a los bancos por los delirios de grandeza del PP”, ha concluido.
