El tráfico en la Plaza de Isabel II será historia después de la remodelación que sufrirá la plaza y que le hará ganar un 495 más de espacio peatonal. Así, los 2.446 metros cuadrados que esta plaza dedicaba a los vehículos rodantes servirán ahora para para dotar de mayor espacio de paseo a los peatones, mientras que los coches se desviarán a la calle Caños del Peral. Además dará continuidad a la calle Arenal conectando peatonalmente esta calle con la plaza de Oriente y con la calle Arrieta. Dos millones de euros será la inversión que el Ayuntamiento de Madrid destinará a este proyecto donde uno de los objetivos es también eliminar las barreras arquitectónicas rebajando todos los pasos de peatones existentes y disponiendo la calzada al mismo nivel de la acera, excepto en las zonas reservadas para la parada del autobús. Por su parte, el proyecto prevé plantar en la Plaza un nuevo arbolado que constará de 78 ejemplares de hoja caduca como perales o cerezos que darán un aspecto más entrañable al entorno y que a su vez crearán áreas de sombra muy importantes para sofocar el calor.