La capilla ardiente por la dramaturga, directora y actriz Ana Diosdado, fallecida ayer inesperadamente cuando asistía a una reunión de la Junta Directiva de la SGAE, de la que era miembro, se ha instalado en la sede de esa entidad por deseo de su familia.
El director de la SGAE, José Luis Acosta, ha explicado que Diosdado asistía a todas las reuniones de la Junta, que ayer tenía una sesión extraordinaria. Diosdado, fallecida a los 77 años, es la única mujer que ha presidido la SGAE, de 2001 a 2007. Premio Max de honor en el año 2013, fue una de las autoras más relevantes de la escena contemporánea española, y desde su ingreso en la entidad en 1996 en la SGAE registró más de 50 obras dramáticas en esa institución.
Por su parte, el grupo municipal socialista ha propuesto que se le conceda el nombre de la intérprete a algún equipamiento cultural de la capital, a través de una carta remitida a la alcaldesa madrileña, Manuela Carmena.
