La agrupación progresista ha elevado dicha propuesta al Pleno de la Junta Municipal de Chamartín, distrito donde se ubica el edificio, semanas después de conocerse que lpropietaria del convento había procedido a talar ocho árboles sin permiso.
En concreto, la empresa taló seis arizónicas y dos cipreses ubicados en el área BIP. Si bien desde el consistorio iniciaron los trámites pertinentes para sancionar a la compañía, la administración local también informó entonces al Ejecutivo autonómico sobre la actuación para que ejerciese “las acciones que le corresponde en aplicación de la Ley de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid».
Desde la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes respondieron que el Gobierno regional no tiene que expedir ningún permiso al propietario en caso de que éste desee realizar alguna actuación en los terrenos del convento, aunque aclaran que éste deberá solicitar una licencia al consistorio.
A tenor de dichos episodios, la concejal socialista, Natalia Cera, defendió ante el resto de grupos municipales representados en la Junta la protección de los jardines. Sin embargo, la iniciativa sólo contó con el voto favorable de Ahora Madrid. No ocurrió así con el resto de propuestas, que tuvieron luz verde por unanimidad de la corporación local.
De esta manera se ha obligado a la propietaria a reponer los ejemplares talados indebidamente; pedir la elaboración de un inventario de toda la vegetación existente en la parcela; e instar al Área de Desarrollo Urbano Sostenible a «girar» una visita de inspección y control sobre el estado de mantenimiento y conservación en el que se encuentra la parte que persiste del convento sin demoler, y se emita un informe sobre la situación en la que se encuentra este edificio protegido.
