Un garaje de la Calle Eugenio Salazar número 48 está siendo un foco de polémica en el distrito. Licencias que no se conceden, papeles que se pierden o visitas institucionales con un supuesto tinte sospechoso. Esta es, en resumen, la situación en que se encuentra el estacionamiento subterráneo de esta comunidad de vecinos del distrito. Así lo ha relatado para EL DISTRITO su ex presidente, Francisco Rubio.
Para este vecino, la historia comienza cuando la sucursal de Caja Madrid del edificio remite en 2004 un escrito quejándose de diversos problemas en el edificio con la electricidad, humedades, etc. Entonces, Rubio comenzó las investigaciones pertinentes y descubrió, según afirma, que el garaje carecía de licencia, algo de lo que, al parecer, tiene conocimiento la Junta de Chamartín desde el año 2007, tras un informe técnico realizado por el Departamento Jurídico. “En el documento -asegura Rubio- se certificaron anomalías, como la carencia de ventilación natural para la evacuación de humos, además de la falta licencia”. Por otro lado, en un escrito firmado por la jefe de la Sección de Disciplina Urbanística de la Junta, se reconoce que “se ha puesto de manifiesto la actividad expresada sin la perceptiva licencia urbanística”.
Pese a carecer de licencia, los vecinos de esta comunidad pagan el vado número 0500001993, “algo que no debería suceder, ya que la Junta está percibiendo un dinero por una actividad ilegal. Considero por tanto, que el Ayuntamiento está jugando con los intereses de mi casa”, afirma indignado Rubio.
Por su parte, la Junta emitió en septiembre de 2008 un expediente de clausura del garaje, sin embargo, poco después, el gerente, según manifiesta Rubio, “retira el expediente de todos los departamentos de la Junta”. Además, envía al jefe de la sección de licencias para que haga una inspección del local. Algo con lo que Rubio se muestra desconcertado pues, “¿por qué volver a inspeccionar el lugar si los técnicos ya habían estado allí?”. Al parecer, tras su visita, el jefe de sección emitió una nota alegando que no procedía “la clausura del garaje y ya se han arreglado todos los problemas de ventilación existentes. Sin embargo, yo soy vecino de allí y no he visto que se haya hecho nada”. Por otro lado, la Policía Municipal se personó en el local el pasado 20 de noviembre y comprobó que el local carecía de licencia.
La Junta Municipal, consultada por este medio, no ha hecho declaraciones al respecto. Sin embargo, Rubio, lo tiene claro: “Si no se cumple la normativa urbanística, que se quite”.
