“Nos lo han quitado todo, nos han dejado sin nada”. Este es el triste resumen que fuentes de la Asociación de Vecinos Los Hotelitos de la Colonia de San Vicente, en el Barrio de la Concepción, han confesado a EL DISTRITO, tras los últimos acontecimientos ocurridos.
Hace unos meses, esta asociación se vio obligada a abandonar el lugar donde venían realizando sus actividades y desarrollando su labor desde hace 23 años. Un problema de expropiaciones, terrenos y licencias que resucita, y vuelve a tomar actualidad, gracias a la proposición que IU presenta ante el equipo de Gobierno, en el último Pleno de Distrito.
Los hechos que explican lo ocurrido se remontan tiempo atrás. La caseta donde se ubicaba la entidad vecinal, hasta hace un tiempo, se encuentra en una parcela situada en la confluencia de las calles Doctor Vallejo y Estrecho de Corea. Según fuentes de la asociación, cuando ellos se instalan allí hace más de 20 años, ese terreno está calificado como zona verde básica; y el Ayuntamiento les hace una concesión. A partir de ese momento, la asociación tiene permiso para desarrollar allí su actividad. Sin embargo, pronto aparece la presencia de una persona, ajena a todo, que se va apropiando de ese mismo terreno, “a base de dinero”, cuenta un miembro de la entidad vecinal.
Enseguida se hace con él y decide construir en una parte una escuela infantil que todavía hoy se encuentra allí. A pesar de que esta persona, al parecer, promete a la asociación concederle un local para que continúe su labor, la realidad luego es otra bien distinta. Finalmente no es así, y sólo les ofrece un poco de espacio exterior. La Asociación de Vecinos Los Hotelitos compra una caseta prefabricada y se instala en ese terreno. A partir de ese momento, todo parece funcionar correctamente, conviven ambas iniciativas (guardería y asociación) durante 10 años, hasta hoy.
Hace menos de un año, el ya propietario de la totalidad del terreno decide dejar de ceder ese espacio a la asociación. Esta se ve obligada a abandonar el lugar, dejando atrás también la pequeña caseta amarilla que es de su propiedad.
Fuentes de la asociación aseguran que lo único que piden es: “que se nos devuelva la caseta porque es nuestra”. Hoy, las actividades y talleres que venían realizando ya no existen, “hemos tenido que dejar de hacerlo, porque no tenemos dónde”.
IU se ha hecho eco de la situación de esta asociación, y ha presentado sus quejas ante el Ejecutivo. Solicitan que se inste al dueño actual de la parcela a la devolución de la caseta, que se busque un emplazamiento nuevo para la asociación y que se lleve a cabo el Plan General de Ordenación Urbana Municipal (PGOUM), por el cual el terreno de la discordia sea destinado a uso público. Ya que, este PGOUM califica dicha parcela de zona verde básica y, sin embargo, en la práctica es privada.
Habla el Ayuntamiento
Según aseguró el equipo de Gobierno, en el pasado Pleno de Distrito: “e-se terreno nunca ha sido del Ayuntamiento, y no tiene responsabilidad sobre él”. Y es que, al parecer, las cesiones sólo las concede el propietario, y el Consistorio queda como un mero “intermediario administrativo”.
