Los bomberos de la Comunidad de Madrid intervinieron ayer en el incendio declarado en un taller de pintura de vehículos de Coslada, en el que se guardaban botellas de acetileno y oxígeno. Los daños fueron escasos y no hubo personas lesionadas.
El primero de los siniestros se produjo en una nave de Coslada, que contiene una cabina de pintura de vehículos. La industria, que tiene 120 metros cuadrados de superficie, en una sola planta, se incendió por causas desconocidas. El fuego no produjo daños relevantes, gracias a la intervención de un trabajador de la empresa, que lanzó un extintor de polvo en los primeros momentos. Tampoco hubo víctimas.
Los bomberos terminaron la extinción con agua y realizaron una revisión completa de la nave, donde encontraron dos botellas de acetileno, otras dos de oxígeno y un depósito de gasoil de 1.500 litros de capacidad. La operación fue realizada por efectivos del parque de la Comunidad de Madrid en la localidad, que desplazaron una autobomba y una escala automática. El servicio duró 45 minutos.
