"Brisa", el pollo de buitre negro bautizado este verano por los niños que asistían a un campamento en Las Rozas, ya ha emprendido el vuelo. El pasado 8 de septiembre Brisa abandonó por primera vez su nido situado en el Parque Nacional de Guadarrama, un momento único que se pudo seguir en directo gracias a la webcam instalada por la Comunidad de Madrid junto al nido y que ha estado emitiendo ininterrumpidamente.
El seguimiento continuo de los progresos, actividad y comportamiento de este buitre negro ediante una webcam es un proyecto de la Comunidad de Madrid en colaboración con SEO/BirdLife puesto en marcha recientemente, que continúa y mejora el seguimiento continuo durante 18 años de la colonia de buitre negro en la Zona de Especial Protección para las Aves “Alto Lozoya”, incluida en parte en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama.
La webcam, que fue instalada por primera vez en 2014 durante la temporada de cría de esa primavera, fue puesta en marcha de nuevo en febrero de este año y ha permitido observar por primera vez en directo todo el ciclo reproductor al completo, desde los tempranos vuelos nupciales de la pareja –unida de por vida- a la construcción o arreglo del gigantesco nido, pasando por la puesta y la incubación de los padres. Desde su instalación, la webcam –cuyas imágenes se pueden ver a través de la página webwww.parquenacionalsierraguadarrama.es– ha recibido más de 100.000 visitas.
Anillamiento de aves
Brisa es uno de los 55 pollos de buitre negro que fueron anillados el pasado mes de julio por el personal de la Consejería de Medio Ambiente que, en colaboración con los agentes forestales de la Comunidad, tomaron las medidas de las crías y les realizaron analíticas de sangre. Este auténtico DNI del ave permite conocer las casusas de mortalidad, las tasas de supervivencia de las aves y su longevidad. Además el anillamiento aporta también información sobre las zonas de alimentación y dispersión de los diferentes ejemplares.
Especie en peligro de extinción
El buitre negro es una especie en peligro de extinción y supone el primer emblema del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama. Madrid cuenta con el 5% de la población europea de esta especie. Las poblaciones de buitre negro de Rascafría han experimentado un aumento considerable, pasando de 6 parejas en 1973 a 110 en la actualidad. Este aumento se debe en parte a la estrategia de conservación e investigación de la especie que lleva a cabo la Comunidad de Madrid.
