Según los testigos, varias personas de origen sudamericano aprovecharon la situación de confusión para acceder al establecimiento y llevarse la caja registradora. Sin embargo, los ladrones fueron sorprendidos por varios residentes en el barrio, y emprendieron la huida sin aparentemente llevarse nada, algo que tendrá que corroborar la Policía.
Por lo que respecta a los supuestos autores del fatal accidente, los agentes del cuerpo local de seguridad detuvieron al conductor y copiloto del vehículo, dos jóvenes de nacionalidad española, que se encontraban en el lugar de los hechos a su llegada. El primero era un joven de 18 años que no disponía del carné de conducir, acusado de un delito de homicidio imprudente y de otro contra la seguridad vial.
El copiloto es un joven de 21 años, propietario del vehículo, acusado de estos delitos y también de lesiones y daños. Éste le habría dejado el vehículo a su compañero para que lo aparcara en la calle, sin embargo, durante las maniobras perdió el control y se empotró contra la tienda. El conductor pasará en breve a disposición judicial, mientras que el dueño del coche, que está en dependencia de la Policía Nacional, todavía está declarando en comisaría y todavía no se sabe si pasará a disposición judicial o quedará en libertad con cargos.