Ubicado en el número 1 de la calle Valdetorres del Jarama, es uno de los dos centros que existen en la Comunidad de Madrid para asistir de forma urgente a los menores en situación de riesgo.
Inmigrantes huidos de su país, menores con problemas familiares, o jóvenes en riesgo de exclusión social acuden o son llevados al Centro de Acogida de Hortaleza, donde los 80 profesionales que trabajan son los primeros en asistirles en su situación. Se encargan de darles cobijo, atención y asesoramiento durante los primeros días de soledad; después, el centro estudia para cada uno de ellos la solución que mejor se amolde a su perfil. Unas veces será buscarles una familia de adopción, otras una residencia o casa de acogida y otras incluso convencerles de que la mejor opción es volver a casa.
La jóvenes asistidos en este centro de acogida tienen edades comprendidas entre los 15 y los 17 años y, como mucho, suelen permanecer aquí un máximo de mes y medio, donde se les da cobijo, comida y educación. “El tiempo que se tarda en estudiar el caso concreto de cada joven y en buscar la solución más adecuada a él”, explica Hermes De la Osa, director del centro.
25 años trabajando
Este mes de junio, el Centro de Acogida de Hortaleza ha cumplido 25 años; un cuarto de siglo orientando y acompañando a los adolescentes en un momento muy duro de sus vidas. Por eso, a la celebración acudieron, además de todos los trabajadores del centro (médicos, psicólogos, profesores y equipo técnico) todas las instituciones que colaboran en este proyecto común, como son: los Servicios Sociales de la Comunidad de Madrid; el Defensor del Menor, Arturo Canalda; representantes del grupo de menores de la Policía y del Tribunal Superior de Justicia de Madrid.
Y aunque esta fue la forma oficial de celebrar el 25 cumpleaños de este trabajo solidario, a lo largo del verano se van a poner en marcha más actos y actividades que homenajeen a un centro que atiende a más de 1.200 jóvenes al año.
