En la zona norte del distrito de Hortaleza, en un espacio colindante con Alcobendas donde se ubica el Encinar de los Reyes, el paisaje de Madrid se perfila con escombros. El concejal socialista, Ramón Silva, ha denunciado que en esta zona en la que en el pasado residieron los militares americanos de la base de Torrejón de Ardoz y donde también hubo algunos asentamientos ilegales, actualmente se acumula un “continuo de vertidos ilegales en paralelo a la M-40”.
Silva ha descrito que los caminos acceden fácilmente a esta escombrera ilegal desde la M-40 e incluso por un paso subterráneo, desde San Chinarro, en el que no está permitido el tránsito de vehículos. Pero pasan. “Es una zona de vertido de escombros que me hace recordar los paisajes de mi infancia”, ha rememorado el edil, que creció y jugó junto a “Los Montes”, un espacio de la Gran Vía de Hortaleza que no era más que el eufemismo de sucesivas montañas de vertidos.
Aunque Silva cree que la situación no es igual a la de entonces, sí encuentra algunas similitudes. El socialista teme que se consientan las acumulaciones ilegales de escombros con la excusa de que con los años pueden convertirse en parques, como sucedió con Las Cárcavas, que ahora es el Parque Forestal de Valdebebas. “No podemos hacer como que no pasa nada, porque no es así”, ha subrayado.
Silva ha reclamado “control” al Ayuntamiento de Madrid, al Área de Medio Ambiente, con la instalación de cámaras que regulen y vigilen el acceso y el vertido de los camiones en esa zona. “Reconozco que el Ayuntamiento pasa una excavadora de vez en cuando para mantener un camino de paso pero es insuficiente lo que hace. Tienen que evitar que se repita el pasado”, ha zanjado.
