El Ayuntamiento de Madrid ha prohibido la celebración del Festival Oro Viejo. Una fiesta de música electrónica de 12 horas de duración que tenía previsto celebrarse en el Palacio de Vistalegre los días 1 y 2 de enero. La decisión responde a los dos informes desfavorables realizados por la Policía Municipal, en los que se afirma que las medidas de seguridad del evento eran insuficientes.
Además de la posibilidad de que se excediese el aforo permitido, los organizadores del Festival presentaron con muy poca antelación el plan de seguridad, lo que hacía imposible evaluarlo.
La Policía destaca en el informe que las gradas de Vistalegre están preparadas para espectáculos donde el público está sentado, algo que choca con este tipo de fiestas y que hace imposible su control. Se afirma también que era posible la obstrucción de las vías de evacuación, y el incumplimiento de la sectorización del recinto, como ocurrió en el Madrid Arena.
