Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo de expertos en lanza térmica que robaba oro, plata y piedras preciosas. Los siete detenidos eran capaces de penetrar en cámaras acorazadas provocando temperaturas de hasta 3.000 grados centígrados. Actuaban en empresas del sector de la joyería y metales preciosos, aunque combinaban esta actividad con otras como tráfico de sustancias estupefacientes y ajustes de cuentas. Visitaban previamente los establecimientos para estudiar las medidas de seguridad y vigilaban los movimientos de los empleados obtener información antes de ejecutar los robos. Es el tercer grupo de butroneros que la Policía Nacional desarticula en apenas 15 días.
El pasado mes de enero los detenidos robaron en un almacén de plata de Madrid. Se apoderaron de objetos por un valor cercano a los 145.000€. Las características de la comisión del robo apuntaban a que el grupo podría contar con una persona en el entorno empresarial que les facilitaba tanto información sobre medidas de seguridad como el acceso a los establecimientos.
El siguiente robo con fuerza fue cometido en una empresa del sector joyero de Alcalá de Henares, donde los butroneros accedieron a la cámara acorazada y se hicieron con piezas de oro y plata, joyas y piedras preciosas, todo ello valorado en cerca de 250.000€. El golpe fue preciso, perpetrado con pleno conocimiento de la distribución de la nave, de las cámaras acorazadas y de la ubicación de los objetos de valor. La cámara fue vulnerada mediante la técnica del oxicorte, que permite fundir los metales más resistentes en cuestión de segundos debido a los cerca de 3.000 grados de temperatura que puede llegar a alcanzar la lanza térmica.
Vía libre
Los investigadores consiguieron identificar a los butroneros. También averiguaron que el hermano del líder de la organización trabajaba en la empresa del sector joyero de Alcalá de Henares, a la que el grupo accedió cuando los complejos sistemas de seguridad instalados se encontraban desactivados.
Los agentes desplegaron entonces un operativo que ha permitido detener a los siete integrantes de la banda de butroneros, entre ellos el cabecilla y su hermano. Por ahora se les considera responsables de cinco robos con fuerza (uno de ellos en grado de tentativa), cometidos en distintas localidades de la Comunidad de Madrid. Además de los robos, el grupo también se dedicaba a otras actividades delictivas como el tráfico de sustancias estupefacientes y los ajustes de cuentas, lo que les permitía acumular gran cantidad de dinero en efectivo que invertían en la compra de bienes muebles (entre ellos varias motocicletas) e inmuebles. Los investigadores también han registrado los domicilios de los detenidos y se han incautado de numerosos objetos, así como de una lanza térmica y diferentes herramientas usadas para practicar los butrones.
