Los 450 trabajadores de Ferrovial (Ferroser) que integran el servicio Línea Madrid (atención al ciudadano) del Ayuntamiento están llamados a ir a la huelga por el anuncio de remunicipalización del servicio por parte del gobierno de Manuela Carmena. Según han informado los sindicatos, el Consistorio obligaría a estas 450 personas a someterse a un examen para optar de nuevo a su puesto. La continuidad de sus trabajos no está garantizada. La Corporación no se ha pronunciado al respecto. El 23 de noviembre han convocado un paro de 24 horas y una huelga indefinida a partir del día 30 de este mes.
La delegada de CC.OO Madrid en el comité de Línea Madrid, Amparo Martínez, aseguró en declaraciones a Europa Press que la convocatoria de huelga persigue el «mantenimiento de todos los puestos de trabajo» en caso de que se remunicipalice el servicio.
En este punto y tras remarcar que «no hay nada en contra sobre la remunicipalización», los empleados que participaron «masivamente» sí quieren que el Ayuntamiento asegure todos los puestos de trabajo en caso de acometer este proceso para recuperar la gestión directa del servicio. «No queremos ni subida de sueldo ni ser funcionarios por la cara, queremos que si se remunicipaliza el servicio, el Ayuntamiento asegure todos los puestos de trabajo», manifestó.
Huelga con concentración
Desde CGT expusieron en un comunicado que el paro se constata ante la situación de «precariedad laboral» de la plantilla y por la negativa de la adjudicataria del servicio de cara a solucionar los problemas de los trabajadores. El sindicato detalla que las asambleas de trabajadores apoyan «sin fisura» que este servicio vuelva a ser «remunicipalizado de manera inmediata», pues existe una situación de «precariedad instaurada» desde su externalización en el año 1992.
Recalca que pese a esa situación se ha desplegado un nivel de «excelencia» en el servicio «reconocido por todos los ciudadanos de Madrid».
La huelga de 24 horas el 23 de noviembre coincidirá con una concentración frente al Ayuntamiento de Madrid en la Plaza de Cibeles y la huelga indefinida coincidirá con el fin del pago de varios impuestos que suelen saturar este servicio público.
