Pendientes de realizar el examen de conducir,así se han quedado las más de 1.500 personas en Madrid, que tendrán que esperar hasta septiembre debido a un repunte de demanda de candidatos en las últimas semanas de julio que ha "desbordado" la capacidad de examinadores de Tráfico, según ha señalado el jefe provincial de Tráfico de Madrid, Cristobal Cremades.
Según Tráfico, este mes ha sido "atípico" porque si bien es cierto que tradicionalmente todos los meses de julio aumenta el número de alumnos, ya que en agosto no se examina y son "muchos" los que aprovechan hasta el último momento para sacarse el carné en verano. En este año, los primeros quince días de julio han sido tranquilos y "han sobrado examinadores", mientras que en las dos últimas semanas "se ha disparado la demanda".
"Las escuelas no se han autorregulado", se ha lamentado Cremades, quien ha subrayado que la jefatura ha estado trabajando estas dos últimas semanas "todos los días a tope", sin conseguir cubrir toda la demanda. En este sentido, ha insistido en que "si la gente se apunta el último día, milagros no se pueden hacer" porque "el número de personal es el que es".
Así, si en enero se presentaron al examen teórico 6.000 candidatos, en julio esta cifra ha aumentado hasta las 11.612 personas. No obstante, este número, pese a que es elevado, es menor que el de julio del año pasado, cuando se presentaron 18.566 personas al teórico y no quedaron tantos candidatos para septiembre. La diferencia es que este año la demanda se ha concentrado los últimos días, según Cremades.
Ante este incremento de solicitudes de exámenes, la Jefatura Provincial de Tráfico de Madrid se reunió con representantes de las autoescuelas para tratar de respuesta a la demanda. La solución acordada fue ofrecer a los examinadores realizar horas extras por las tardes esta semana y trabajar algún día en agosto, a cambio de días libres de compensación, en vez de pagar esas horas, como otros años.
Por su parte, Tráfico niega que haya habido falta de previsión y denuncia que lo que ha fallado ha sido la autorregulación de las autoescuelas. "Yo preveo que va a haber más, pero no puedo poner más examinadores, no los tengo, son los que son", ha indicado Cremades, quien ha recordado que antes las autoescuelas sólo podían presentar cuatro alumnos por profesor y semana, pero que ahora ya no existe ese límite.
"Esto es como las operaciones de un quirófano, si las operaciones de promedio son de dos horas y el quirófano está diez horas, pues puedo esperar a cinco. Pues aquí igual, si tengo noventa examinadores y hacen dieciséis cada uno, pues puedo examinar a tantos, si me presentan más, esos al día siguiente, es una lista de espera normal y corriente", ha explicado.
"Esto es como las operaciones de un quirófano, si las operaciones de promedio son de dos horas y el quirófano está diez horas, pues puedo esperar a cinco. Pues aquí igual, si tengo noventa examinadores y hacen dieciséis cada uno, pues puedo examinar a tantos, si me presentan más, esos al día siguiente, es una lista de espera normal y corriente", ha explicado.
