La administración de las comunidades de vecinos deja de ser un problema gracias a la aparición de páginas Web y aplicaciones para smartphones que permiten tanto a los vecinos como al administrador comunicarse de forma rápida y sencilla a través de Internet. Tanto es así que Madrid ha pasado de tener de 3.598 a 5.389 comunidades gestionadas a través de Internet, demostrando con ello una gran aceptación de estos sistemas.
A través de estas páginas los vecinos pueden dejar constancia de las incidencias mediante un sólo click, que quedan registradas en la aplicación, sin tener necesidad de ponerse en contacto directo con el administrador, permitiendo además un conocimiento inmediato del problema por parte del responsable. Pero no sólo eso, también pueden interactuar con el resto de vecinos e intercambiar información. De esta manera, el administrador de la finca se desprende de tareas innecesarias, dejando de ser un mero telefonista para dedicarse plenamente a las funciones propias de su profesión.
Es un servicio transparente y gratuito que permite al usuario acceder a toda la información que se registra, y sólo requiere un ordenador y una conexión a Internet. Con este sistema de gestión se pueden conocer las facturas y los pagos que realiza el administrador, así como los vecinos deudores, las quejas, problemas, incidencias y también las diversas soluciones que se proponen.
En España son cada vez más las comunidades de vecinos que se han unido a esta revolución tecnológica para agilizar sus gestiones. Madrid está a la cabeza en el uso de estas páginas, superando las 5.300 comunidades.
Sobre Informatización de Empresas S.L. (IESA)
IESA es una compañía dedicada al desarrollo de aplicaciones informáticas para la administración de fincas y la gestión inmobiliaria. Constituida en el año 1985, tiene como objetivo mejorar las condiciones laborales de los administradores y adaptar sus productos a las nuevas tecnologías.
Gesfincas, es uno de estos softwares, que facilita la comunicación entre vecinos y con el administrador, posibilita la resolución de incidencias en el edificio, y mejora la calidad del trabajo del administrador permitiéndole centrarse en las tareas más importantes.
