Los trabajadores de Metro de Madrid, convocados hoy en Asamblea para votar si iban a huelga o no en contra de los recortes contemplados por el Gobierno regional en las empresas públicas, ratificaron casi por unanimidad convocar paros para los días 28, 29 y 30 de junio, tal y como habían propuesto los sindicatos más representativos (Sindicatos de Conductores, CC.OO., UGT, Solidaridad Obrera, Sindicato Libre y Sindicato de Estaciones).
Así lo explicó el secretario general de UGT en Metro de Madrid, Teodoro Piñuelas, quien señaló que esta mañana acudieron unos 600 trabajadores a la asamblea convocada y que de ellos, la inmensa mayoría ratificó los paros convocados, pues consideran que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, "va a hacer algo que está fuera de la ley".
Aunque esta tarde hay un segundo encuentro, los paros ya salen adelante con la votación de esta mañana, cuando también han decidido mantener los servicios mínimos que se negocien con la compañía para el día 28 "para demostrar que respetan la ley" aunque, sin embargo, se ha concretado "saltarse" los que se establezcan para el resto de días (29 y 30 de junio).
De todos modos, Piñuelas indicó que el Gobierno regional está a tiempo de dar marcha atrás a los recortes fijados en una media del 5 por ciento en los salarios de los trabajadores de las empresas públicas, y que lo pueden hacer el próximo jueves, 23 de junio, cuando se traten las enmiendas presentadas a esta medida en la Asamblea de Madrid.
Precisamente, este día, a las 16 horas, los trabajadores de Metro están convocados a una concentración a las puertas del Parlamento madrileño, a donde acudirán para reiterar que esta medida "no se ajusta a la ley" pues hay un convenio colectivo firmado recientemente que recoge las condiciones laborales de los empleados y "que hay que cumplir". "Están a tiempo de dar marcha atrás", apostilló.
En este caso, si finalmente no se procediera a la rebaja de los sueldos de estos trabajadores (también afecta a los de Telemadrid o Canal de Isabel II, entre otros), los paros se desconvocarán. "A lo mejor entiende Esperanza Aguirre que nadie se puede saltar la ley, sea marquesa o no", concluyó. La compañía del suburbano cuenta con unos 7.500 trabajadores.
