Los trabajadores del metro de Madrid se movilizan hoy por tercer y último día consecutivo en protesta por la intención de la empresa de rebajar los salarios en un 10% e incrementar la jornada laboral. Los paros parciales de la mañana se han llevado a cabo desde las seis y media hasta las nueve y media.
Durante estas horas, han circulado el 56% de los trenes y en todas las estaciones y ha permanecido al menos un vestíbulo abierto con sus correspondientes accesos. El tiempo de espera ha estado en una media de seis minutos y desde primera hora los vagones y los andenes se han visto repletos de pasajeros.
El comité de empresa ha convocado una manifestación entre la calle del Néctar —en el distrito de San Blas, junto a los depósitos de Metro— y la estación de Canillejas a partir de las siete y media.
Los paros de hoy suceden a los del martes y miércoles, que han transcurrido sin incidencias y con seguimientos que la empresa ha fijado en el 50% y los sindicatos han aumentado al 100%.
Borja Carabante, viceconsejero de Transportes, Infraestructuras y Vivienda, cifró ayer en un millón de euros el perjuicio que las tres jornadas de paros ha supuesto a las arcas de Metro.