Los vecinos de los barrios próximos a la Dehesa de la Villa han visto en la fuga de la Central Nuclear de Ascó-Tarragona- un motivo de preocupación. Y es que, es allí, concretamente en Ciudad Universitaria (Avenida Complutense, 22) donde el Ciemat -Centro de Investiga-ciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas- tiene uno de sus centros de operaciones. A raíz del Plan integrado de mejora de las instalaciones del Ciemat (Pimic), se consolida la Coordinadora de Afectados por dicho Plan, asociación que ha solicitado al Gobierno central un estudio epidemiológico en los barrios cercanos a la central. El objetivo: detectar posibles fugas radiactivas. El problema no es nuevo ya que según fuentes de la Coordinadora, el Ciemat albergó un “cementerio nuclear” sin reunir las condiciones de seguridad necesarias. Por eso, hace unos meses la asociación realizó entre los vecinos de la zona colindante un estudio, cuyas cifras resultaron ser motivo de preocupación para algunos: “el número de casos de cáncer en la zona es un 7% superior a la media nacional”. Así, su portavoz, Manuel Yuste, se quejó de la poca sensibilidad que muestran los madrileños y sus políticos ante este asunto y animó a llevar a cabo una serie de actuaciones reivindicativas imprescindibles para ex-plicar la necesidad de llevar a cabo el desmantelamiento de la central y la realización de estudio epidemiológico sobre la influencia que la instalación ejerce sobre la salud de las personas, “en una zona como la universitaria en la que deambulan miles de muchachos y muchachas en edad fértil, que son los más proclives a las radiaciones”.
Para octubre está prevista una ca-rrera de una milla entre el Conse-jo de Seguridad Nuclear y el Cie-mat, en la que podrán participar todos los ciudadanos. Los premios serán tres medallas fabricadas de plutonio, americio y uranio.
