Tomar una caña o un aperitivo en las terrazas de la plaza de la calle Antonio Cumella este verano será una misión imposible. Más que nada porque este año los dueños de los bares no las han podido poner. “Nos han mandado varias cartas. Una por navidades donde se nos revocaba la licencia del año pasado que habíamos pagado hasta el 3 de junio. Alegaban ruidos y molestias para los vecinos. Luego recibimos otra que nos decía que donde poníamos nuestras terrazas era un paso de emergencias. ¡Pero si ni siquiera está señalizado!”, relata Pedro Giménez, dueño de Mi Bar. Según cuenta Pedro la licencia que les concedieron el año pasado ya tenía restricciones: “teníamos que recoger las terrazas a las 23.00 horas, cosa que no pasa en ningún lado, y cumplíamos con ese horario”. Raquel, dueña del bar El Olivo, explica que les dieron la posibilidad de poner las terrazas dentro de la plaza “pero por otro lado nos dijeron que estas no podían estar a más de 12 metros del bar”. Todo esto está perjudicando no sólo a los dueños de los bares, que están haciendo menos caja que en invierno, sino que también está quitando puestos de trabajo “como no hay terraza no podemos contratar a gente de temporada. No la podríamos pagar”. Además, los vecinos de la zona han realizado varias manifestaciones y caceroladas en contra de esta medida “el ambiente que había en la plaza en verano era envidiable. Parecía como un oasis en medio del barrio. Nosotros nos tomábamos algo mientras nuestros hijos jugaban en la plaza”, aseguran los vecinos de la zona. Además, afirman que el deterioro de la plaza va en aumento “antes había buen ambiente pero ahora hay gente con motos, haciendo botellones y fumando porros y a ellos la Policía no les dice nada”.
Los bares de la zona han recogido unas setecientas firmas que llevarán en los próximos días a la Junta del distrito y afirman “ya hay dos bares que han tenido que cerrar. El Goodwill es uno de ellos y llevaba 15 años en el barrio. Este año lo damos todo por perdido pero como el próximo no podamos poner las terrazas nos tendremos que ir”. Por su parte el concejal del distrito, Fernando Martinez Vidal, asegura que “intentaremos aplicar el sentido común. Lo que está claro es que no podemos ir contra las ordenanzas municipales”.
