Un parque del tamaño de El Retiro entre Moratalaz y Ciudad Lineal. Eso será pronto la Cuña Verde de O´Donnell, una histórica reivindicación vecinal que se materializa en 110 hectáreas de zona verde y recreativa que contribuye a mejorar la calidad ambiental de los residentes en Vicálvaro y San Blas, además de los dos distritos citados.
Presentación de la tercera fase
El alcalde de la ciudad, Alberto Ruiz-Gallardón, acompañado de la concejala de Medio Ambiente, Paz González, presentó el pasado 28 de abril los trabajos de la tercera fase de la Cuña Verde de O´Donnell, una muestra más, según sus palabras, del compromiso adquirido por el Ayuntamiento de “vertebrar Madrid en verde”. Según fuentes municipales, en este mandato se han aportado 280 árboles cada día al patrimonio de la ciudad. El parque es fruto del acuerdo suscrito con la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Ma-drid (FRAVM), entidad que ha participado activamente en su diseño. Acabadas la primera y la segunda fase, la tercera acabará en otoño. “En ese momento -informó Ruiz-Gallardón-, tras una inversión de 5,3 millones de euros, habremos puesto a disposición de los ciudadanos 26 hectáreas de parque en los que se habrán plantado cerca de 5.000 árboles y más de 30.000 arbustos”.
Criterios sostenibles
El diseño del parque obedece a criterios de sostenibilidad. Criterios que incluyen la plantación de árboles y arbustos que necesitan poco agua y muy adaptados al clima madrileño, o la instalación de una red de riego automático que conectará con la red general de agua regenerada que se está construyendo. Cuando concluya la fase presentada hoy, el Ayuntamiento habrá actuado sobre más de 46.000 m2 de caminos y zonas pavimentadas. Habrá instalado más de cinco kilómetros de una doble red de agua potable y reciclada, más otros 55 de conducciones de riego automático y goteo. Contará también con 142 bancos, cinco áreas infantiles, dos circuitos biosaludables y otros dos para mayores y más de 160 farolas.
Legado natural para la ciudad
El regidor subrayó el papel esencial que en la urbe desempeñará un parque como este, que “acerca la naturaleza al interior de la ciudad con un espacio destinado al ocio y al encuentro de los ciudadanos, y que beneficiará a medio millón de madrileños”. Paz González, por su parte, manifestó que esta plantación significa que las nuevas generaciones “devuelven a sus hijos y nietos los espacios verdes del futuro”.
