El consejero de Asuntos Sociales ha destacado que a pesar de la crisis los inmigrantes realizan un esfuerzo por continuar enviando remesas a sus familias en los países de origen. La media se sitúa en 227 euros mensuales, 9 euros menos que la media del período anterior. Los datos muestran que los inmigrantes que llevan menos tiempo en España como los paraguayos y bolivianos realizan más envíos que los que llevan más tiempo como los marroquíes o chinos.
Cuando se les pregunta si piensan regresar a su país, el 40,08% piensan establecerse en España, el 33,79% quieren regresar a su país (3,44 menos que en 2012) y el 9,59% están considerando desplazarse a otro país como Reino Unido, Estados Unidos o Alemania (4 puntos más). De los que desean regresar, el 56% afirma que se marchará en unos años y el 26% dice que lo hará pronto. Por nacionalidades, los que más presentan su interés por retornar son los paraguayos, bolivianos y dominicanos.
Los chinos son la comunidad extranjera que presenta una situación laboral más estable con el 90,26% de los encuestados con empleo y el 8,44%, desempleado. En el ámbito del emprendimiento, casi el 14% trabaja por cuenta propia frente al 11% en el mismo período en 2012. En esta área, destaca la nacionalidad china. El 36,69% de los inmigrantes chinos son autónomos o tienen su propia empresa.
Siete de cada diez inmigrantes llegaron a España entre 2001 y 2011. No obstante, siguen llegando aunque en un porcentaje muy reducido. Destaca el aumento de la población de origen chino en los últimos dos años (casi un 11% más). “Casi el 21% de los encuestados posee la nacionalidad española, cinco puntos más que en 2012, lo que refleja el buen resultado de las políticas de integración que desarrolla la Comunidad”, ha indicado Fermosel.