La FAES, el Centro Nacional de Inteligencia o la Casa Real son algunas de las instituciones que se han visto salpicadas por el apodado ‘pequeño Nicolás’. Desde que saltó la noticia la semana pasada de la detención de Francisco Nicolás Gómez Iglesias, de 20 años, por hacerse pasar por asesor del Gobierno de España con documentación falsa, el juez ha decretado el secreto de sumario, mientras que por su parte el Ayuntamiento de Madrid ha hecho sus investigaciones.
Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado 17 de octubre a Nicolás porque presuntamente estafó 25.000 euros falsificando informes del Centro Nacional de Inteligencia. Al arrestado, que residía con sus padres en el barrio de Prosperidad en Chamartín, también se le imputó un delito de usurpación de funciones públicas y se le incautaron placas de la Guardia Civil y Policía Municipal de Madrid, así como un rotativo policial. El investigado habría entregado a una víctima el falso informe del CNI a cambio de 25.000 euros. Para intentar dar credibilidad a la estafa, el joven alquiló un vehículo de alta gama con chófer para reunirse con su víctima.
La magistrada titular del juzgado de instrucción número 24 de Madrid, acordó al día siguiente la libertad provisional de Nicolás, quien se derrumbó en la vista repitiendo la frase "a mi me la han liado, me han engañado". En su auto, la jueza le obliga a comunicarle los cambios de domicilio realice, le prohíbe abandonar el territorio nacional, le retira el pasaporte en el caso de que tenga y le apercibe que el incumplimiento de estas medidas pueden suponer una reforma de su situación procesal.
Visita fake del Rey
Tras conocer las andanzas del ‘joven Nicolás’ así como su relación con la Policía Municipal de Madrid, el Ayuntamiento de la capital inició una investigación para esclarecer por qué un agente escoltó en un viaje a Lugo al joven de 20 años. La unidad de asuntos internos abrió un expediente para determinar quién estaba detrás de todo. De hecho, ayer el consistorio madrileño hizo pública la expulsión de un policía que durante un día de libranza acompañó al joven a una falsa comida con el Rey.
La investigación se inició después de que el joven difundiera vídeos en los que se le ve dentro de un coche con una sirena policial. El agente que le acompañaba pertenecía al servicio de protección de la alcaldesa, Ana Botella y al parecer aquel evento le habría servido para ganar un extra, se desconoce si más policías habrían intervenido en otras andanzas de Nicolás. Lo que si es cierto es que, el colarse en la coronación de Felipe VI en el Palacio Real o acceder a eventos de la Comunidad de Madrid sin pasar controles, indican que tras el ‘pequeño Nicolás’ alguien se esconde.
65.000 euros estafados a dos empresarios
Nicolás es estudiante del Centro Universitario de Estudios Financieros (CUNEF) y al parecer se habría hecho también con 65.000 euros de otros dos empresarios.
Con motivo de la visita a España de Salomon Chertorivski, secretario de Desarrollo Económico de Ciudad de México, el empresario E.A. confesó esta semana a ‘El Confidencial’, sentirse engañado tras citarse con Nicolás, quien se presentó como asesor del Gobierno y secretario general de Nuevas Generaciones de Aravaca. El joven dijo conocer a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría y le invitó a un acto de la Comunidad de Madrid en el que no tuvo que pasar control alguno, además le cerró un encuentro con el asesor de la secretaría de Estado de Comercio, Sergio Pérez Saiz.
Nicolás le ofreció a E.A. la compra de su empresa, como intermediario o “testaferro” de Felipe VI, tras revisar el contrato el abogado de E.A. se percató de su irregularidad y acabó su relación. Tras esto ya le había estafado 10.000 euros para financiar un desayuno informativo y 1.000 euros para unas entradas de la Champions con el objetivo de un encuentro con Amancio Ortega que nunca se produjo.
Asimismo, el joven Nicolás obtuvo de otro empresario madrileño unos 54.000 euros para prestar fondo a jugadores de casino. Por el momento, sólo se le acusa a Nicolás de la estafa de 25.000 euros por falsas gestiones en Moncloa para la venta de un terreno en Toledo.
Los orígenes de Nicolás
El germen de la historia de Gómez Iglesias se remonta a la FAES, donde llegó de la mano de su madre con 14 años comenzó a elaborar su nutrida agenda de contactos y personalidades. Entre ellos el expresidente del Gobierno, José María Aznar, con quien se le ha podido ver en alguna charla o el actual secretario de Estado de Comercio y cabeza visible de la fundación, Jaime García Legaz.
El Ayuntamiento de Madrid también se ha visto salpicado por Edhinor, empresa que alquiló un chalet de El Viso en el que estuvo empadronado Nicolás y que a su vez se hizo en una Unión Temporal de Empresas (UTE) con el contrato de construcción de la Ciudad de la Seguridad en los antiguos recintos feriales de Casa de Campo por unos 15 millones de euros, junto a otros contratos. De hecho, Izquierda Unida ha solicitado saber la relación entre consistorio y Edhinor, empresa que se desmarca de cualquier tipo de relación con Nicolás.
Altos cargos del Ayuntamiento, Comunidad de Madrid, Gobierno y Zarzuela están tras la sospecha de Nicolás. Y no solo se esconden sus padrinos, sino que también el joven, centro de toda la historia, se halla en paradero desconocido y seguro que no en un acto oficial.
