La pintura vuelve a ser protagonista en la sala de exposiciones de Casa de Vacas. Esta vez, es la obra del pintor Diego Gadir la que ocupa las paredes del emblemático centro cultural. El pasado 22 de febrero, la concejala del distrito, Elena González Moñux, inauguró esta exposición personal que, bajo el lema Los trabajos del corazón, recoge pinturas y dibujos de este pintor gaditano de acrisolada trayectoria artística.
Muestra rica y heterogénea
La muestra está compuesta por treinta y seis obras de pintura y dibujo, realizadas fundamentalmente con las técnicas tradicionales, si bien las fechadas más recientemente incorporan técnicas de recorte y pegado de materiales textiles, papeles, cartulinas, etc. no empleados a la manera típica del collage, sino en función de la imagen representada para potenciar efectos visuales de calidades y texturas. La obra más antigua de las expuestas, “La mañana del Sábado”, un óleo de 1991 que ha gozado siempre de gran admiración por parte de los aficionados. Destaca además el grupo de obras fragmentadas que formaron parte de las exposiciones Fragmentos de Luz y Forma y El animal espiritual, obras expresionistas que diseccionan la imagen en piezas sin encajar, lo que alude a la inestabilidad espiritual del hombre moderno. Otro grupo, el correspondiente al lustro 1995-2000, evidencia una percepción mística de la naturaleza, con animales y frutas y verduras que son ejemplo de realismo expresionista. Destaquemos por último la serie de seis obras “Un drama japonés”, un diálogo creativo con artistas y estampadores orientales.
Realidad e intuición
Gadir se ve a sí mismo como un médium, y explica que el título de la muestra alude a su propósito de “conectar la realidad con territorios intuitivos”, como son los del pensamiento y la emoción.
Estará abierta hasta el 18 de marzo.
