Piscina climatizada, aeróbic, aquagym, fitness, G.A.P, spinning, bailes de salón… Decenas de actividades a disposición de los madrileños, en una amplia variedad de horarios y sesiones. Así es como se presenta el nuevo polideportivo que acaba de abrir en el distrito, y que se encuentra al final de la calle Elvira.
Desde que el pasado 5 de enero abriera sus puertas, decenas de vecinos guardan su turno en los pasillos del centro para inscribirse en las actividades, y ser partícipes de las múltiples opciones que ofrece. “Lo más llamativo para la gente es el solarium externo, pero se trata de un servicio que se da únicamente en la temporada de verano” comenta uno de los encargados del polideportivo. De momento, pilates es la actividad con más vecinos inscritos, mientras que la de step es la menos demandada.
Aspectos que mejorar
A pesar de que las instalaciones son completamente nuevas, y son los vecinos que se apuntan ahora quienes están estrenando todas las máquinas, todavía hay ciertos aspectos que mejorar. Los nuevos usuarios se quejan del excesivo tiempo de espera que han de guardar para inscribirse en una actividad. “De una a tres horas” comenta una vecina del barrio que espera la cola para apuntarse a baile de salón.
Sin embargo, el mayor problema que encuentran es la disposición de las salas. Y es que, prácticamente enfrente de la puerta de entrada al polideportivo se encuentra el vestuario de señoras; por lo que la intimidad de estas se ve reducida, además de estar expuestas a las bajas temperaturas de la calle. “¡Poner una mampara por lo menos!” recriminó esta misma vecina a uno de los encargados del centro. El polideportivo de titularidad pública, pero gestión privada, está siendo llevado por la empresa Trapsa. Por lo que los problemas de infraestructura siguen dependiendo del Ayunta-miento, que asegura que solucionará el problema de los vestuarios lo antes posible.
