El verano es temporada alta en las zonas turísticas y también lo es para los fabricantes de helados, que concentran la mayor parte de sus ventas en esta época del año. Con este delicioso tentempié o postre también hay que tomar algunas precauciones si nuestros hijos son alérgicos a la leche y el huevo. Antes de darle uno a sus niños, los padres deberán leer atentamente las etiquetas de los helados por si llevaran esos dos productos o componentes que los contuvieran.
La doctora Cristina Ortega Casanueva, alergóloga del Hospital Quirónsalud San José, detalla qué componentes empleados en la elaboración de los helados pueden contener leche:
-Albúminas, lactoalbúmina
-Colorante de caramelo
-Globulina, lactoglobulina
-Saborizante de caramelo
-Caseína, caseinato
-Saborizante natural
-Grasa de manteca
-Suero, suero en polvo
-Solidificante
-Suero sin lactosa
-Saborizante artificial
-Proteínas de suero
-Lactosa
-H4511, H4512, H4513
Por otra parte, los productos con alguno de los siguientes componentes pueden contener huevo:
-Albúminas
-Emulgente
-Coagulante
-Clara
-Yema
-Homogeneizante
-Globulina
-Lecitina (E-322)
-Lisozima (E-1105)
-Livetina
-Vitelina
-Ovoalbúmina
-Ovomucina
-Ovomucoide
-Ovovitelina
-Luteína(E-161b)
La doctora Ortega Casanueva, que integra el Departamento de Pediatría y Neonatología del Hospital Quirónsalud San José y del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, recomienda, ante cualquier duda, consultar con un pediatra alergólogo. Además, recuerda que se puede obtener más información en la web de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergología y Asma Pediátrica (Seicap, http://pacientes.seicap.es/es/) y que algunas sociedades actualizan continuamente los productos y marcas sin leche y/o sin huevo (www.aepnaa.org).
