El conocido como ‘triángulo de la muerte’ de Las Musas ha perdido otro de sus vértices.
El pasado 10 de enero, un grupo de operarios retiraba por fin la antena de telefonía móvil instalada en la azotea del número 29 de la calle Butrón. Los vecinos de esta comunidad de propietarios habían decidido, el pasado 23 de octubre de 2010, no firmar la prórroga del contrato suscrito años antes con la operadora Vodafone. Según informan, estaban preocupados por el sospechoso número de casos de cáncer de mama y otros tumores diagnosticados en el entorno. Desde entonces y hasta la retirada de la antena, los vecinos aseguran que la compañía ha estado emitiendo de manera ilegal, a pesar de las insistentes comunicaciones remitidas por la comunidad a la multinacional y de rechazar las ofertas económicas remitidas por ésta para prorrogar la actividad.
Aunque llegaron a ser tres las antenas instaladas en inmuebles de la calle Butrón -en los números 27, 29 y 31- en la actualidad sólo una de ellas permanece en pie. Fue la comunidad de propietarios de Butrón, 27 la primera en tomar la decisión unánime de no prorrogar el contrato suscrito con Vo-dafone, ante la inquietud generada por el incremento de tumores. Hace días desaparecía la torre instalada sobre el 29 y, al parecer, la misma suerte correrá la antena instalada en la azotea del número 31. Según ha declarado Cándido Flores, de la Asociación de Ve-cinos de Las Musas, “es sólo cuestión de tiempo”. Al parecer, la comunidad de propietarios de este inmueble ya ha decidido, también por unanimidad, no firmar la prórroga del contrato, que expira en el año 2013. “Hasta entonces -añade- seguiremos vigilando y denunciando todos los atropellos que cometa France Telecom, que en 2010 instaló, sin los necesarios permisos, nuevos receptores y varios amplificadores. No vamos a bajar la guardia- advierte- hasta que en 2013 caiga la tercera antena”.