Parece extraído de una película, pero lo que vivieron dos vigilantes de seguridad a las puertas del Centro Comercial Plenilunio fue real. Los hechos ocurrieron el pasado 18 de diciembre en torno a las 20.45 horas, cuando cuatro motoristas armados con escopetas de cañones recortados asaltaron un furgón blindado situado a las puertas del establecimiento. Según informaron fuentes policiales, los vigilantes se encontraban sacando al furgón dos sacas con dinero procedente de la caja del Banco de Santander cuando los ladrones se abalanzaron sobre ellos y los encañonaron, apropiándose de sus armas reglamentarias. Además, en el enfrentamiento los dos vigilantes resultaron heridos. El primero, de 36 años, presentaba una brecha en la cabeza y tuvo que ser trasladado al Hospital de La Concepción, donde ingresó con pronóstico leve. Su compañero, fue atendido por el Samur de fuertes golpes en la espalda, pero fue dado de alta en el lugar, pese a que requiere de revisiones periódicas.
Un atraco muy bien planeado
Todo apunta a que los asaltantes habían planeado y estudiado el golpe minuciosamente, puesto que parecían tener muy claro la hora a la que se iba a producir el traslado del dinero y supieron esperar pacientemente a que los vigilantes salieran a la calle con las sacas llenas.
Testigos del suceso aseguraron que los atracadores actuaron a cara descubierta y huyeron en dos motocicletas de gran cilindrada. Pero, pese a la rapidez con la que actuaron, la confusión y el nerviosismo se apoderaron de esta superficie comercial que se encontraba llena de clientes.
En cuanto a la identidad de los atracadores, la Policía aún no ha hecho público ningún dato oficial y continúa investigando, pero podrían ser de nacionalidad argentina.
