Un plan de acción a corto plazo contra la exclusión social para todas las familias madrileñas. Un plan con intervenciones en cuatro apartados: empleo, educación, vivienda y prestaciones sociales. Es la propuesta que ha formulado hoy el portavoz del grupo municipal socialista, Jaime Lissavetzky, tras visitar el Centro de Servicios Sociales de la calle Fuentidueña (Villa de Vallecas). Acompañado por los ediles del PSOE Pedro Zerolo y Carmen Sánchez Carazo, Lissavetzky ha sido contundente en su mensaje a la alcaldesa, Ana Botella: “Que no se lave las manos como Poncio Pilatos” y acometa, desde el Ayuntamiento, “desde lo público”, actuaciones urgentes en materia de Servicios Sociales.
Para el portavoz del PSOE, Ana Botella “está deslumbrada por el fuego olímpico” y no ve la grave situación por la que atraviesan las familias madrileñas como consecuencia de la crisis. Los socialistas “queremos los Juegos Olímpicos de 2020”, constató Lissavetzky, pero el Gobierno municipal debe adoptar medidas extraordinarias y políticas de choque ante la “emergencia social” que vive la capital.
Madrid necesita de una acción política “directa, fiable y real”, insistió el portavoz socialista, que lamentó que en el último Debate sobre el Estado de la Ciudad el PP rechazara todas las propuestas de su grupo para evitar la exclusión social.
Y a juicio de Lissavetzky, debe ser el Ayuntamiento, y no las ONGs (“que merecen todo nuestro respeto”), el que lidere las actuaciones. “No podemos mirar para otro lado” –subrayó– porque “todo lo que ocurre en esta ciudad tiene que ver con el Ayuntamiento”. En sentido, ha apuntado que los representantes políticos tienen la obligación moral de adoptar medidas desde el sector público para ayudar a los que tienen más necesidades.
Entre los datos aportados por el PSOE para defender la necesidad de su plan sobresale algunos: el umbral de la pobreza de los menores de 16 años en la metrópoli se sitúa en el 23%; 1,3 millones de madrileños están en situación de vulnerabilidad social; el paro alcanza el 19,35% y 1 de cada 5 familias tienen graves dificultades para llegar a fin de mes.
Áreas de intervención
El portavoz del PSOE ha detallado las áreas de intervención del Plan contra la exclusión social: empleo, educación, vivienda y prestaciones sociales. Respecto al primer punto, Lissaveztky apuesta por la formación y capacitación de los sectores en riesgo de exclusión para mejorar su acceso al mercado laboral.
Garantizar el acceso a las escuelas infantiles públicas y programas contra el absentismo y el fracaso escolar son el pilar del sector de la educación. Los socialistas también solicitan que la EMVS recupere su “objetivo social” y que se cree una oficina para atender a los afectados por los desahucios.
Sobre las prestaciones sociales, el portavoz del PSOE ha declarado que “igual que Botella habla de quitar trabas a los emprendedores”, también “hay que suprimir las barreras sociales para que las ayudas lleguen más rápido” y avanzar más en la Ley de Dependencia.
Recursos
“Si se quiere, hay financiación” para poner en marcha este Plan, ha asegurado Lissaveztky. Por ejemplo, con los 81 millones de euros que no se gastaron del presupuesto de Servicios Sociales el pasado año. También es financiable recuperando el nivel de inversión social del año 2010, cifrado en casi 59 millones de euros. Y utilizando para políticas sociales el superávit de más de 800 millones de euros que dice tener el Ayuntamiento. Además, el PSOE reclama al Gobierno de Mariano Rajoy y de la Comunidad de Madrid que recuperen en 2014 los 74,9 millones de euros de los fondos para financiar los planes contra la exclusión social.
