La concejala socialista Ruth Porta ha pedido la comparecencia en el próximo Pleno Municipal del delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid para que explique las razones y las circunstancias que produjeron el siniestro ocurrido en el pozo de ventilación nº 4 de la M-30 el pasado 26 de octubre de 2012, que causó la muerte de dos operarios de la empresa EMESA encargada del mantenimiento de los túneles de la M-30 por inhalación de gases sulfurosos.
Porta ha exigido al gobierno municipal que “depure las responsabilidades políticas, administrativas y civiles que se derivan de este asunto, ya que las penales ya se están dirimiendo en los tribunales”, y que “determine quién es el responsable de que ningún sistema de control y protección de incendios funcionara el día del siniestro, de que las botellas de nitrógeno estuviesen vacías y de que el compresor de aire que necesita esta instalación estuviese fuera de servicio durante diez meses”.
La edil del PSOE considera que “Medio Ambiente se comportó en este asunto con negligencia y pasividad por no inspeccionar el funcionamiento de los sistemas de control de incendios del pozo siniestrado y por no fiscalizar que la empresa EMESA estuviera cumpliendo con las obligaciones derivadas de su contrato con el Ayuntamiento de Madrid y tuviera todos los dispositivos antiincendio en buenas condiciones de funcionamiento”.
Para Porta, “este siniestro pone en entredicho la seguridad en el interior de los túneles de la M-30. Pedimos que el gobierno municipal explique cuáles y cuántos riesgos han corrido los madrileños que durante estos años han circulado por los túneles de la M-30, que nos digan desde cuándo conocía el gobierno municipal estas deficiencias y cómo es posible que hayan permitido que EMESA haya hecho de su capa un sayo en este asunto, incumpliendo gravemente con el contrato”.
Concluye la concejala socialista asegurando que “los madrileños tienen derecho a circular tranquilos por los túneles de la M-30 y con lo que vamos conociendo en este asunto no pueden estarlo en absoluto, porque alguien está poniendo en riesgo su integridad. Está claro que los fallos en el pozo nº 4 no eran un caso aislado, sino que se extendían a otros tres, lo que indica que la situación de la seguridad en el interior de los túneles de la M-30 es simplemente desastrosa”.
