Rubén no olvidará nunca el pasado 21 de septiembre. Como cada mañana, se dirigía en Cercanías a la Universidad Carlos III, donde cursa sus estudios de Periodismo y Comunicación Audiovisual. Todo transcurría con normalidad hasta que, por avería, el tren se detuvo en Villaverde Bajo y los pasajeros tuvieron que desalojarlo. Rubén, que se desplaza en silla de ruedas, quedó entonces atrapado en el andén. La estación de Villaverde Bajo no está adaptada a personas con problemas de movilidad; así que, sin ascensor, le resultaba imposible cambiar de andén o abandonar el intercambiador. Tras poner el caso en conocimiento de Renfe y la Policía, ninguno le aportó solución alguna, por lo que Rubén tuvo que volver a la estación de Sol para acceder al tren que le llevó por fin hasta Getafe; eso sí, después de tres horas de angustia.