La Policía Nacional ha detenido a tres personas -dos hombres y una mujer- acusados de vender droga cuando realizaban un control rutinario en el distrito de Villaverde, tras intervenir 22 kilos de hachís (repartidos en 1.800 ‘bellotas’ y siete placas’) y 7.000 euros.
Según informa la Jefatura Superior de Policía en un comunicado, la droga era vendida en un «piso franco» y en el operativo también se ha intervenido básculas de precisión, elementos de corte, embalaje y distribución y un cuaderno de anotaciones.
Las informaciones que alertaban sobre un posible menudeo de droga en los barrios de San Cristóbal de los Ángeles y Ciudad de los Ángeles motivaron que se pusiera en marcha un dispositivo para la prevención de este tipo de delitos.
Así, a comienzos del presente mes, un indicativo policial observó la presencia de un individuo que levantó las sospechas de los agentes. El mismo se introdujo en un vehículo portando una bolsa de plástico permaneciendo durante unos minutos, para posteriormente salir sin ella.
El conductor del turismo, tras percatarse de la presencia policial, intentó emprender la huida a gran velocidad siendo interceptado. La citada bolsa contenía 100 bellotas de hachís. En ese mismo instante tanto comprador como vendedor fueron detenidos.
Paralelamente a estos hechos y tras averiguar de donde procedía la droga los agentes establecieron un dispositivo en torno a una vivienda del distrito de Villaverde, dando sus frutos cuando observaron que una mujer salía del inmueble con una maleta de grandes dimensiones.
Al proceder a su identificación y cacheo comprobaron que la maleta contenía varias bolsas de plástico con multitud de bellotas y placas de hachís, por lo que igualmente procedieron a su detención.
Tras realizar el registro domiciliario, los agentes se incautaron además de 7.000 euros en efectivo, básculas de precisión, elementos de corte, embalaje y distribución y un cuaderno con varias anotaciones con diferentes cantidades de dinero.
Los tres detenidos fueron puestos a disposición judicial. La investigación ha sido llevada a cabo por agentes de la Comisaría de Usera-Villaverde, perteneciente a la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
