Las urgencias del Hospital Doce de Octubre están colapsadas. Esto es lo que anunció el pasado 28 de noviembre la sección sindical de Comisiones Obreras (CC.OO.) de este hospital. Este sindicato afirmaba que había 116 pacientes que desbordaban los boxes de urgencias, a pesar de que cuatro de estos espacios, siendo individuales, ya tenían tres pacientes.
Un problema de política sanitaria
“Hay -señala el sindicato- 23 camas en los dos lados de los pasillos quedando un espacio de apenas 50 centímetros por donde se hace muy complicado el paso, que tapan las vías de evacuación y que supone unas condiciones pésimas para pacientes que, en algunos casos, están muy mal”. A pesar de ello el sindicato no considera que la culpa sea estrictamente del hospital sino que se trata, a su juicio, de un problema de política sanitaria, especialmente debida a un desequilibrio entre la atención primaria y la se-cundaria y argumentan que “cada vez se demoran más las citas para el médico de cabecera de forma que ya es normal no conseguirla en el día sino dos días después e, incluso, cuatro días. Por ello al no obtener una solución rápida a sus problemas los pacientes se dirigen a urgencias”. El portavoz de CC.OO., Enrique Orsi, afirmó que la situación que estaban viviendo durante esos días era horrible, que se pasaban media hora para buscar el material, que por otra parte no era suficiente, y que todo esto influía de forma directa en que los pacientes no pudieran ser atendidos en condiciones.
Refuerzo de personal
Por su parte, el Hospital Doce de Octubre destacó que había reforzado su servicio de urgencias con cinco enfermeras, incrementándose la actividad de los servicios de radiología y laboratorio, en las últimas semanas para atender a la creciente demanda de pacientes. Además, respecto al “colapso” denunciado por CC.OO., apuntó que el pasado 27 de noviembre se atendieron un total de 839 urgencias totales. “La patología de una gran mayoría de estos pacientes requería el ingreso en el centro sanitario, lo que motivó una mayor congestión durante la tarde y la noche”, afirmó el centro hospitalario. Además, se realizó el traslado de pacientes a otros hospitales .
Estas circunstancias reavivan cada vez más el clamor de los vecinos para que de una vez por todas se consiga la construcción de un hospital en los terrenos de la cárcel de Carabanchel y que el Gómez Ulla se convierta en un hospital de uso público.
