La calle Bustamante ha sido el escenario de la protesta de varios delegados sindicales de CC.OO., UGT, CSIF, y UPM, en representación de los agentes de movilidad de Madrid.
Con el objetivo de protestar contra el excesivo trabajo con el se les sobrecarga, se han encerrado en el registro de un equipamiento público en dicha calle del distrito.
Antes este colectivo estaba formado por 1.000 trabajadores, y ahora sólo quedan 598 haciendo el trabajo de todos, por lo que alegan saturación laboral con sus posibles consecuencias. Con esta protesta buscan establecer un diálogo a través del cual se consiga una revisión de contratos, así como un reconocimiento a su carrera y trabajo.