(EFE). Estas instalaciones deportivas, según Martínez-Almeida, son una concesión administrativa del Gobierno municipal del PP de la que se benefician un club «de más de 600 personas» y que vence el próximo 30 de junio.
El club ha pedido una prórroga el pasado 13 de febrero «prevista en los pliegos» pero la concejala de Ahora Madrid, Rommy Arce, «no se ha dignado a contestarles».
«Mucho nos tememos que va a haber 600 chavales que se van a quedar sin jugar al fútbol durante el año que viene como consecuencia del sectarismo y radicalismo de Rommy Arce, que pretende entregar estas instalaciones, como siempre, a los amiguetes de su entorno, despreciando el interés general de los que vienen aquí a jugar al fútbol», ha concluido Almeida.