Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Equipo de Policía Judicial del Aeropuerto de Barajas, lograban en el marco de la Operación “Gran Flor”, desmantelar un entramado dedicado a la importación de flor fresca de Colombia, utilizado como tapadera para la introducción de cocaína en nuestro país.
La operación tenía su origen el pasado mes de mayo, cuando Agentes especializados en el estudio de la documentación relativa a la mercancía que entra en nuestro país, a través del Aeropuerto madrileño, detectaban la importación de flor fresca a través de una empresa afincada en la capital de España.
Esta nueva empresa se dedicaba a la importación de flor natural, especialmente rosas, desde Colombia y, una vez eran recogidas, eran trasladadas desde el Aeropuerto hasta un almacén, ubicado en Madrid capital, desde donde supuestamente se realizaba la distribución.
El volumen de las importaciones, y la escasa actividad comercial de dicha empresa, hizo sospechar de la misma a los Agentes de la Unidad Orgánica de Policía Judicial destacados en el Aeropuerto madrileño, quienes iniciaban sus pesquisas sobre el regente de la empresa tapadera.
Así, los Agentes podían comprobar que las flores naturales, lejos de ser distribuidas a tiendas, se dejaban pudrir dentro del almacén y luego eran arrojadas a los contenedores de basura.
Este hallazgo hacía que, a finales de la pasada semana, tras detectarse una expedición comercial de rosas, se procediera a su interceptación, localizando los Agentes la forma de importar la droga, la cual viajaba oculta en los envoltorios que cubren a las flores durante el trayecto.
La Guardia Civil logró intervenir en la partida de 550 kilogramos, un total de 203 envoltorios impregnados en cocaína de gran pureza, que arrojaron un peso superior a los 100 kilogramos, motivo por el que ha sido detenida la persona encargada de recepcionar dicha mercancía.
La investigación continúa abierta, no descartándose nuevas actuaciones policiales.
