Con este y otros indicios de un posible enriquecimiento ilícito, la acusación popular que ejerce Podemos en el caso Villarejo se ha opuesto al archivo de la pieza en la que se investigaba a Salamanca, a su mujer y a su hijo por organización criminal y cohecho en relación con un negocio con empresarios guineanos a los que supuestamente facilitaba su entrada en España dándoles un trato «vip».
En su recurso ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, al que ha tenido acceso Efe, Podemos, al igual que ha hecho también en su correspondiente recurso la Fiscalía Anticorrupción, critica al instructor Diego de Egea por archivar esta pieza sin esperar al resultado de diligencias pendientes sobre el patrimonio de Salamanca, que también fue investigado en la operación Emperador.
Esta acusación no se explica que se haya archivado esta pieza sin haber siquiera acreditado «el origen ni la forma de pago de los numerosos vehículos de alta gama de los que él o sus familiares investigados han sido usuarios y tomadores del seguro oficialmente y titulares en la sombra».
Se trata de dos Porsches -un Cayenne y un Panamera-; dos Volkswagen -un Touareg y un Golf-; dos Range Rover, uno de ellos modelo Evoque, y un Toyota Rav4, todos ellos de «titularidad en registros de empresas del entramado del Sr. Villarejo Pérez pero cuyo dueño real es el señor Salamanca Vilches, reconocido por él mismo, quien tampoco ha explicado el origen del dinero y el método de pago de los mismos», apunta Podemos.
El Panamera, que según el documento de compra costó 116.000 euros, era inicialmente propiedad de los guineanos y acabó en manos de Salamanca en 2012 y, «aunque lo conducía, nunca lo registró a su nombre en la DGT temeroso de que la ostentación del mismo le fuese perjudicial», afirma la denuncia anónima de la que partió este procedimiento y que reproduce Podemos.
Lo que sí hizo, añade la denuncia, fue asegurarlo a su nombre, tal y como acreditó la Fiscalía, «durante el tiempo que estuvo en su poder» antes de vendérselo a Gao Ping, presunto líder de la trama mafiosa china desarticulada en el caso Emperador, en el que la imputación de Salamanca también acabó en archivo.
Por todo ello, además de revocar el archivo, Podemos reclama un nuevo informe policial sobre los vehículos utilizados por el excomisario de Barajas «para acceder y aparcar en sus plazas de garaje asignadas» en la T1 y la T4 del aeropuerto y «si en concreto en algún momento ha utilizado o ha dado de alta en los registros de las Comisarías de ambas terminales o de los controles de registro de AENA» las matrículas de esos coches.
Y es que para Podemos, «las referencias continuas» que hizo Salamanca a una «indemnización por un accidente de coche de 200.000 euros en 2003 y un premio de lotería de 800.000 euros en 2013, no bastan para cubrir la compra de tantos coches, bienes de lujo (relojes) y viajes».
«En estos seis meses el Sr. Salamanca Vilches podría haber aportado todos estos extractos de movimientos de sus cuentas bancarias para acreditar que existen salidas de fondos correspondientes a los suntuosos gastos que afirma haber abonado» y sin embargo la investigación se archiva sin tener esos datos, añade el recurso.
Al sobreseer esta pieza, De Egea argumentó que no había indicios claros de los delitos denunciados porque «no consta la identidad de ninguno de esos ciudadanos extranjeros» involucrados en esos hechos, ni tampoco prueba documental «sobre la expedición de visados en frontera a aquellos sin el cumplimiento de los protocolos reglamentarios».
Argumento que Podemos rebate recriminando a De Egea el cierre de una investigación sin esperar al resultado de pesquisas pendientes sobre el alcance de los hechos denunciados y que tendrían como prueba regalos con los que Méndez Rubio supuestamente habría pagado favores a Salamanca, como los más de 25.000 euros con los que presuntamente obsequió a su hijo por su boda, además de coches y viajes.
