La propietaria de la perfumería ‘Aqualuna’, en Carabanchel, no daba crédito mientras comprobaba lo que faltaba del inventario de su establecimiento, del que robaron gran cantidad de productos de alta perfumería.
La dueña se dio cuenta, el pasado 3 de enero sobre las 9:30, cuando contempló un enorme butrón, de casi un metro de diámetro, cuando entró por la puerta, el número 26 de la calle Belzunegui. Al otro lado de la pared perforada, un cuarto de registro de cañerías de agua por el que entrearon los cacos. La comisaría de Carabanchel se ha hecho cargo de la investigación del robo, que “tradicionalmente” se producen en Navidad.
Según la Delegación del Gobierno en Madrid, se están produciendo menos robos que otros años en vísperas de Reyes. Los artículos de cosmética, prendas de marca, relojes y joyería, electrónica y juguetes siguen estando muy cotizados en el mercado negro.
