(EFE). Con esta acción, de la que ya se han cumplido 16 ediciones, los vecinos del barrio reivindican «la urbanización de esta zona que debía haber sido realizada por la Junta de Compensación del PAU», que «lo dejó sin hacer y el Ayuntamiento todavía no ha sido capaz de desbloquear el asunto y resolverlo», señalan en un comunicado.
«Las últimas noticias son que está previsto licitar las obras de construcción del parque en los próximos meses, pero esto ya se ha prometido en ocasiones anteriores», añaden.
El PAU de Carabanchel se finalizó en 2004 y el parque debería de haberse terminado ese mismo año, pero solo cuenta con 300 árboles que los vecinos han plantado en sucesivas arboladas, además las especies autóctonas que se han desarrollado durante este tiempo. Este domingo, tras la plantación y riego, los congregados han escuchado «el romance del árbol, recitado por Rosa, de la asociación TREPA que siempre está presente en las plantaciones. Y un caldito caliente ha sido la recompensa de todo el trabajo realizado», agregan.
Entre los árboles ya plantados abundan los olmos, los almendros, fresnos y arces; también hay pinos, olivos, higueras, majuelos y algún álamo. El parque cuenta incluso, con un «manolito» (monolito de pizarra) con una placa conmemorativa del acto de inauguración celebrado en 2006. El vecindario lleva 15 años reclamando este parque en una zona verde de dos kilómetros de longitud, para que sea una barrera natural entre el barrio y la M-40, concluye la nota.
