Según los sindicatos la ampliación de las horas lectivas para los profesores tendrá un efecto negativo sobre la calidad de la educación. Hablan, por supuesto, de la enseñanza pública. En la concertada no tienen ese problema, porque sus profesores ya imparten más de 20 horas semanales por término medio. Y la calidad no parece resentirse; de hecho, muchos colegios concertados figuran en los primeros puestos de los rankings.