Ayer hemos visto cómo el ‘Gurú’ de los empresarios españoles y su vicepresidente, han vuelto a protagonizar la antesala de la quiebra de su buque insignia, Viajes Marsans, al ser retirada su licencia para vender billetes a través de IATA (International Air Transport Association).
Esta situación, creada por los problemas de liquidez que mantienen y que arrastran de su pésima gestión empresarial, ha hecho que casi 700 trabajadores estén en la calle sin cobrar las nóminas que les adeudan (Air Comet y Seguros Mercurio).
Yo hoy suscribo las palabras de Díaz Ferrán el 23 de diciembre de 2009, después de dejar a decenas de miles de usuarios de Air Comet en tierra y sin devolver el importe de los billetes vendidos, que decía: “Yo no hubiera elegido Air Comet para volar a ningún sitio”. Hoy, haciéndole caso, no voy a elegir Viajes Marsans para ir a ningún sitio.